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Carla Figueroa, el mural en su ciudad
Ph Lautaro Zabala

Carla Figueroa: el relato de Melina, su hermana

Por Lenny Cáceres

Carla conoció a Marcelo Tomaselli a los 13 años, cuando ella tenía 16 nació su hijo, V. En la madrugada del 10 de diciembre de 2011, Tomaselli la asesinó a puñaladas. Estaban presente el hijito de ambos y la mamá de él.

Tomaselli la violó, fue preso, pero quedó libre porque ella lo “perdonó. La defensa apeló a la figura del avenimiento, se casaron. La mató una semana después.

A raíz del femicidio del Carla Figueroa la figura del avenimiento quedó cuestionada. El “avenimiento” o “reconciliación” estaba contemplado en el artículo 132 del Código Penal y establecía que en casos de violación, y cuando haya relaciones afectivas preexistentes entre víctima y victimario, el tribunal puede “excepcionalmente” aceptar la propuesta de ella si fue formulada “libremente” y “en condiciones de igualdad y si considera que es un modo más equitativo de armonizar el conflicto con mejor resguardo del interés de la víctima”. Así se extinguiría la acción penal. Luego del caso Figueroa el 21 de marzo del 2012 la presidenta derogo la figura del avenimiento del código penal. Para Carla llegó tarde.

Melina, la hermana de Carla, recibió a Diario Digital Femenino en su casa. Un diálogo amoroso, distendido, donde Melina relata su historia junto a Carla y habla no sin preocupación del presente y futuro de su hijo, que tiene a cargo desde el femicidio.

Melina perdió a su madre de la misma manera que perdió a Carla. En la ciudad se dice que Carla repitió su historia de su mamá, que había muerto igual, en una situación de violencia cuando era muy joven.

¿Tu mamá también fue víctima de femicidio?

Si, también vivió lo mismo, la mató su marido, el papá de Carla.

¿Lo hablaban con Carla? ¿Ella lo supo?

-Si sabía, nosotros se lo contamos porque en ese momento ella era muy chiquita, tenía ocho meses. Ella trataba de hablar conmigo porque la entendía, era su papá, pero no hablaba mucho del tema y tenía diálogo con su papá, su papá aún está vivo. Estuvo preso ocho años por ese femicidio, salió a los cuatro años por buena conducta.

¿Qué rol cumplió el papá con la muerte de Carla?

Ninguno, cuando ella fue más grande lo visitaba en la cárcel, los abuelos paternos la llevaban. No tenía ningún rencor. Una vez lo hablábamos cuando ella fue más grande, porque a mí me dolía eso que ella hacía de ver a su papá y me enojé, pero la entendí porque ella me dijo «yo no conocí a mi mamá» y en parte tenía razón porque lo único que ella tenía era su papá.

¿De la relación de Carla con Tomaselli estabas al tanto?

-Él era una persona que no demostraba ser lo que era, pero después cuando ella empezó a venir con golpes uno va atando cabos y te das cuenta. Intentaba hablar de violencia con ella, todo el tiempo, ella no se daba cuenta de lo que le estaba pasando, yo se lo decía siempre y ella a veces me escuchaba y a veces se enojaba y me decía que yo siempre le veía el lado malo a las cosas, pero yo le decía que era más grande y que sabía lo que podía pasar.

¿Te acordás como vivió el embarazo de V.?

– Estuve un poco distanciada de ella en el embarazo porque tuve una pelea con Tomaselli, no fue muy importante, pero me volví a comunicar con ella a los seis meses de embarazo. No sé si la acompañaba en el embarazo. Ellos vivían solos, y yo no tenía mucho trato con él, no me acercaba mucho a ella por él

¿Él la tenía aislada de sus amigos y amigas?

– Si, yo sabía que él era muy celoso y ella también. Ella no salía porque él se ponía celoso. Ella trabajaba y lo mantenía a él, porque nunca trabajo, solo algunos trabajos de albañilería chiquitos.

¿A qué edad empieza a salir ella con Tomaselli?

– A los 14 años, él 34 cumple este año, en octubre. Ella quedó embarazada a los 15, él es 7 u 8 años más grande que ella

¿Carla con quién vivía en ese momento?

– Vivía con mi abuela. Yo crie a mi hermana hasta los dos años, mi hermana tenía nueve meses y yo me casé para criarlos a ellos.

¿Ya tenés la tenencia del niño?

-No aún está en trámite, ya pasaron 7 u 8 años. Hay trabas para que me den la tenencia.

¿Te vienen a ver las trabajadoras sociales para saber cómo está V.?

-No, no vienen, nadie sabe cómo vive, cómo está, si le pasa algo, nadie sigue esta situación, el Estado está ausente

¿Con el tema de la ley brisa?

-No lo estoy cobrando, lo único es su asignación universal, nada más.

¿El niño habla de su mamá?

-Él sabe que soy su tía, y sabe quién fue su mamá, no habla mucho y a su papá no lo nombra.

¿Si hicieran el documental sobre su historia, vas a dejar que lo vea o si le vas a contar?

-Lo que él me pida se va a hacer, hay cosas que no le digo para no lastimarlo, ya demasiado lastimado está con lo que vivió. No hago nada que pueda llegar a hacerle mal.

Hay alguna accción que desde infancia que te sugieran…. ¿V. hace terapia?

– Yo pedí un turno con una psicóloga, a la semana que murió mi hermana, me dijo que el nene no necesita psicóloga que es bueno que el nene lo hablé y no que lo tenga guardado. El en ese momento hablaba todo el tiempo, tenía miedo, no quería que nadie se acerque. Al principio venían todo el tiempo las asistentes sociales pero ahora hace años que no viene nadie.

V. no tiene trato con la familia de su papá y Tomaselli intento verlo pero yo le gané dos juicios.

La mamá de su nueva hija quiere ver a Tomaselli pero en ese caso la justicia actuó bien y no les permiten verse. Al parecer Tomaselli dijo que la iba a «hacer cagar» a ella (la madre de su nueva hija).

¿Qué necesitas que se destrabe para poder cobrar la reparación – Ley brisa?

No puedo cobrar porque me falta la data/carta de sentencia del padre. Pero no está en Pico, está en Santa Rosa, y todavía no lo logro tramitar

En breve se presentará el libro del escritor Andrés Borrello que aborda esta historia ¿Qué pensás del libro?

-Me encanta, está buenísimo, para que no haya más Carlas, aunque lo veo imposible…

Me gusta porque en el libro a Tomaselli no se lo hace víctima, como pasa en todos lados, la única pobre es mi hermana con todo lo que le pasó, y ahí está bien contada la historia, como corresponde. Nunca habíamos escuchado hablar bien de ella a nadie, como ahora está muerta y no se puede defender, la tildan de mala, de que se lo merece, etc. Pero nadie habla de que era una niña.

¿Vos también escribiste para el libro?

Hablando con Andrés pensamos en escribir un capítulo sobre Carla, pero como el libro no habla de la víctima sino del victimario y los crímenes sobre las mujeres, decidimos sacarlo y darle otra voz a la familia.

Hay veces que quiero decir muchas cosas y no puedo, entonces escribo, me puede más el dolor. Por lo general tengo momentos de no querer hablar de mi hermana, me hace mal hablar de ella todos los dias, trato de esquivar mucho el tema, porque me cuesta salir.

¿Quién te contiene?

Todos mis hijos y mi familia. Mi hija Paola fue un motor para luchar por los derechos de las mujeres. Yo creo que a ella esto le da fuerzas para seguir, pero le duele igual que a mí o peor porque es a quien le toca salir y poner la cara, para protegerme, para salir adelante.

Melina tiene cinco hijos, Paola tiene 24, Franco 22, Florencia 19 y Luciano tiene 17. V., el hijo de Carla, tiene 9. Tiene también un compañero con el que se casó de bastante joven.

*Ley 27.452 (de Régimen de Reparación Económica para niñas, niños y adolescentes) otorga una reparación económica para hijas e hijos víctimas de femicidios equivalente a una jubilación mínima.

**A partir del momento que hicimos esta nota, y como parte de una red que se dedica a hacer relevamiento nacional para que todas las niñas/os/es reciban el resarcimiento económico “Ley Brisa”, realizamos las gestiones correspondientes para agilizar el trámite y que por fin V. cobre lo que le corresponde.

El hijo de Carla Figueroa todavía no cobra el resarcimiento, Ley Brisa*
Tomaselli, el femicida de Carla Figueroa

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