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La importancia del orgasmo va más allá del placer físico: juega un papel esencial en la conexión emocional entre las parejas, en el bienestar general e, incluso, en la salud física.

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Por una cuestión social, los hombres siempre fueron mucho más estimulados a conocer su propio cuerpo. Para las chicas, esto siempre fue un tabú: la masturbación fue algo prohibido y pecaminoso por razones culturales y educativas.

La comunicación clara es un paso clave para lograr el orgasmo.

“A diferencia del orgasmo masculino, visible a través del semen, el orgasmo femenino carece de señales evidentes en las mujeres que lo experimentan. Quizá por eso fue siempre misterioso”, plantea el doctor Bernardo Kupferberg (M.N. 62.974), sexólogo clínico, miembro de la comisión directiva de la Sociedad Argentina de Sexualidad Humana (SASH).

El experto asegura que son numerosos los estudios a nivel mundial que llegan a una misma conclusión: 1 de cada 10 mujeres nunca va a tener un orgasmo. “Esto es así y lo cito en mis conferencias”, remarca.

El cuerpo de cada mujer responde de manera diferente a varios tipos de estimulación sexual

“Son muchas las mujeres con dificultades para llegar al orgasmo. Y la mayoría de quienes lo logran requieren estimulación del clítoris. Solo una proporción relativamente pequeña logra experimentarlo a través del coito”, describe Kupferberg, docente adscripto en ginecología de la Universidad de Buenos Aires.

La satisfacción física y emocional es más importante que el orgasmo

Según Claudia Petry, miembro de la Sociedad Brasileña de Sexualidad Humana (Sbrash) y especialista en educación sexual de la Universidad Federal de Santa Catarina (UFSC), Brasil, también es necesario abordar la “dictadura” del orgasmo, según la cual la mujer que no alcanza la sensación del orgasmo no es considerada normal en ciertas sociedades. “Lo más importante es tener una satisfacción física y emocional en la relación íntima, ya sea con una misma o con una pareja”, aconseja.

Durante el orgasmo, la mujer expulsa dos fluidos diferentes.

“Lo importante de la sexualidad es que no hagamos una gimnasia. No hay un tutorial de poses y pasos a seguir. Hay que descentralizar lo genital”, remarca Silvina Valente (M.N. 87.798), presidente de la Sociedad Argentina de Sexualidad Humana (SASH).

Qué hacer para tener un orgasmo

La masturbación puede ser clave para la salud sexual. No hay una manera correcta o incorrecta de masturbarse: se trata de descubrir qué tipos de contacto y sensaciones funcionan para la mujer, y es una forma de aprender a tenerlos. La mayoría de las mujeres que alcanzan el orgasmo con una pareja también tuvieron un orgasmo por la masturbación.

Orgasmo femenino: una guía para que las mujeres se conozcan más a sí mismas
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El ranking de posturas con las que hay más posibilidades de experimentar un orgasmo, según se ha demostrado, es el siguiente:

  1. Estimulación manual.
  2. Estimulación oral.
  3. Penetración en cabalgada con estimulación manual al mismo tiempo.
  4. Penetración a tergo (posición sexual comúnmente conocida como el perrito) con estimulación clitoriana.
  5. Penetración en cabalgada sin estimulación.
  6. Postura del misionero.

El beso, un atajo que acerca el orgasmo

Según Dani Fontinele, terapeuta sexual, sexóloga clínica y miembro de la Asociación Brasileña de Profesionales de Salud, Educación y Terapia Sexual (Abrasex), el beso tiene gran importancia para que la mujer alcance el clímax.

TN
Fotos: Adobe Stock

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