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ENTREVISTA A ANA MARIA*
PRECURSORA DE LA LUCHA CONTRA LA VIOLENCIA MACHISTA EN ESPAÑA  

“Recuerdo a un profesor que preguntó qué se podía hacer con los impulsos sexuales de los hombres sin prostitutas, a lo que Suzanne Képès respondió: “Yo le aconsejo llegar a su casa, tomarse un trago, distenderse con una hermosa música y masturbarse”. Jajaja … ¡Esta conferencia tuvo lugar hace más de treinta años!”

Por Adriana Pedrolo
Para Diario Digital Femenino.

Abogada, apasionada y feminista, entrevistamos a Ana María en un bar de un balneario de su ciudad, Almería, donde accedió a interrumpir sus vacaciones para concedernos esta entrevista.

Conocedora de la situación de las mujeres, esta activista fundó en 1977 (junto a otras nueve mujeres) la primera organización en España que se ocupó de la Violencia de Género y cuya labor continúa desarrollándose. Se trata de la Comisión para la Investigación de malos tratos a las mujeres  (hoy ONG consultora de Naciones Unidas).

DDF: – ¿En qué consistía aquel trabajo de la Comisión y cómo se gestó?

AM- Aclaro primero que nuestra organización se llamó “Comisión” porque una ley franquista prohibía llanamente la existencia de asociaciones. Yo trabajaba en el Tribunal Tutelar de Menores cuando murió Franco (1975). Allí detectamos -a partir de nuestro contacto con niños y niñas- una violencia terrible en las familias, naturalizada con respuestas del tipo: “Mi marido me pega lo normal”. Risas.

La prensa, desde la revista El Caso, reproducía voces masculinas con titulares como “La maté porque era mía”. Rápidamente notamos que los femicidios (por aquel entonces llamados simples “homicidios”) eran precedidos siempre por malos tratos. Decidimos que había que investigar eso.

Un equipo de psicólogas, trabajadoras sociales, médicas, sociólogas y abogadas, en contacto con mujeres maltratadas, descubrió que la problemática tenía grandes dimensiones, invisibilidad y tolerancia social, y que este combo hacía su solución muy difícil. Era un tema tabú y nos acusaban de que queríamos terminar con la familia.

 DDF: -¿Por dónde empezaron?

AM -Se tenían que ofrecer alternativas para que esas mujeres pudieran romper con esas situaciones de violencia. En 1983 nos constituimos legalmente como organización independiente y feminista con el objetivo de erradicar la violencia contra las mujeres. Ya se había creado el Instituto de la Mujer y a través de una subvención pública, desde la Comisión para la Investigación de Malos tratos a las Mujeres, durante varios años se llevó a cabo el seguimiento de las casas refugio que se iban CREANDO en las distintas comunidades autónomas.

Desde el principio nos abocamos a dos ámbitos: la violencia de género y la explotación sexual, con acciones y medidas pioneras tanto de presión social como de intervención. En el 2000 la Comisión abrió delegaciones en Andalucía (Sevilla), y en 2017 en el Norte de España: (Pamplona y Barakaldo).

Desde la Comisión impulsamos las primeras instrucciones aprobadas por el Ministerio del Interior para sistematizar la recepción de denuncias y en los 90 se logró inaugurar el primer servicio de atención telefónica gratuita de ayuda a mujeres maltratadas de España. Ahí es cuando aparecen más asociaciones que se dedican al tema.

DDF – Nos decías que se ocuparon también de la explotación sexual de mujeres. ¿Qué visión tienen del lobby reglamentarista?

AM -Desde la universidad que el tema de la prostitución nos interesaba mucho. Ya lo veíamos como Violencia y por primera vez en España consideramos al mal llamado “cliente” y al proxeneta como piezas clave en el entramado de la prostitución.

Como sabemos, el abolicionismo -iniciado por Joséphine Butler en Inglaterra se extendió a Francia, país que se incorporó a la Federación Abolicionista Internacional, de la que también formábamos parte nosotras. En sintonía con el abolicionismo, organizamos en España una charla con una de sus más célebres exponentes, la psiquiatra francesa Suzanne Képès, médica ginecóloga y sexóloga feminista.

“El Cliente” fue el título de esta primera conferencia sobre el llamado cliente de la prostitución. Se puede decir que sus respuestas sorprendieron mucho a la concurrencia. Recuerdo a un profesor que preguntó qué se podía hacer con los impulsos sexuales de los hombres sin prostitutas, a lo que Suzanne Képès respondió tranquilamente: “Yo le aconsejo llegar a su casa, tomarse un trago, distenderse con una hermosa música y masturbarse”. Jajaja ¡Y yo tenía que traducirle las respuestas! Fue arduo y a la vez muy divertido y necesario. ¡Esta conferencia tuvo lugar hace más de treinta años!.

DDF: – ¿A qué atribuyes el lobby reglamentarista?

AM -La prostitución no se puede separar de la trata de mujeres. La trata es la globalización de la prostitución y constituye el segundo gran negocio en el mundo. Lejos de la idílica imagen de la película “Pretty Woman”, la prostitución constituye hoy un verdadero campo de concentración. Respecto al lobby reglamentarista no se puede olvidar que la Unión Europea no está haciendo mucho en el tema. Algunos partidos políticos se dicen abolicionistas pero no actúan tampoco en consecuencia.

DDF: – ¿Cómo abordarla entonces?

AM -Creo que hasta que la prostitución no esté en las agendas públicas como formando parte de las Violencias a las mujeres MUY POCO se habrá hecho.  Si los gobiernos no se hacen eco de la prostitución como una forma de violencia, maltrato y abuso -como dominio y poder sobre el cuerpo y el alma de las mujeres- la situación seguirá como está.

En la actualidad la mayoría de las mujeres en prostitución -en España- vienen de otros países más pobres en busca de una vida mejor, de mejores oportunidades Las españolas son menos, se trata más bien de extranjeras en situación irregular, sin documentación. Se conocen  las secuelas físicas y psicológicas que las mujeres guardan para siempre de esta violencia.

La educación en valores de igualdad de los niños y niñas es algo que hay que tener muy presente y que hoy todavía en la mayoría de los países no se lleva a cabo. No es lo mismo la educación mixta que la educación en igualdad.

DDF: – ¿Cuál es tu mirada sobre el tratamiento que se le da al tema en las políticas públicas?

AM -El Ministerio de Trabajo permitió aquí en 2018 la creación de un sindicato para las mujeres en situación de prostitución y nuestra Comisión demandó su nulidad y disolución. Fue una acción conjunta con Plataforma 8 de Marzo de Sevilla, (integrantes ambas de la Plataforma Estatal de Organizaciones de Mujeres por la Abolición de la prostitución).

Se hizo por considerar que el objetivo principal de esta sindicalización -que dicho sea de paso impulsó un hombre- era el inicio de la legitimación del proxenetismo y la normalización de la explotación sexual de las mujeres, algo que nos parece incompatible con una sociedad igualitaria y democrática. La violencia sexual y la comercialización del cuerpo de las mujeres no pueden ser materia de negociación colectiva; y deberían ser tratadas en nuestro sistema normativo como formas de violencia patriarcal.

La prostitución es el segundo gran negocio en el mundo. La abolición de la prostitución es por tanto un tema de Derechos Humanos. Y en este sentido hasta en Holanda y Alemania –países reglamentaristas- ya hay intentos de terminar con la reglamentación de la prostitución.

Pero queda mucho por hacer. Recordemos sino que en España, hasta que la Constitución estableció la igualdad entre hombres y mujeres y se cambió el Código Penal en 1996, la víctima de una violación podía en cualquier momento del proceso perdonar al violador y este quedaba sin cargo alguno. Es lo que se llamaba «el perdón de la ofendida» que todo lo borraba,

Dirigirse educativamente a los hombres y a los chicos jóvenes para concientizarlos en la igualdad como algo fundamental para la democracia me parece la columna vertebral y preventiva de toda política pública.

Abolicionismo en el mundo

Recordamos que Suecia desde 1999 dispone de una ley de Violencia contra las mujeres que incluye a la prostitución como una de sus formas y muestra de desigualdad de género. Finlandia y Noruega legislaron en el mismo sentido. Estos países apuestan por un nuevo modelo de abolicionismo, que en vez de penalizar a las prostitutas pretende acabar con el comercio sexual estrechando el cerco sobre los clientes (considerando que si no hay demanda, no habrá oferta). Tras Suecia, la criminalización de los clientes de la prostitución se ha aprobado en Islandia, Canadá, Singapur, Sudáfrica, Corea del Sur, Irlanda del Norte (desde 2015) y Francia. También en Noruega, con el añadido de que ese país también persigue a aquellos que hacen turismo sexual.

Además, el Parlamento Europeo instó en 2014 a los Estados miembros a adoptar fórmulas similares y Bélgica, Irlanda y Escocia debaten actualmente proyectos de ley basados en el nuevo abolicionismo. Otros países, como Finlandia, han apostado por un sistema híbrido: castigan la compra de servicios sexuales, pero solo si la prostituta es víctima de las redes de trata.

Diez años después de que entrara en vigor la ley, el número de compradores de sexo en Suecia había descendido del 13,6% a menos del 8% de la población, según datos del Instituto Sueco. “La norma tiene un objetivo disuasorio sobre los potenciales compradores de sexo. También ha servido para reducir el interés de diversos grupos o individuos de establecer actividades organizadas de prostitución en Suecia”, añade. Desde que entró en vigor, unas 6.600 personas —todos, salvo contadísimas excepciones, hombres— han sido detenidas por comprar sexo o intentar hacerlo. De ellos, aproximadamente la mitad han sido condenados (aunque aún no están disponibles los datos de sentencias de 2015). Eso sí, ninguno ha entrado en prisión. Para esquivar las rejas han pagado una multa de al menos un tercio de sus ingresos diarios durante dos meses.

Abolir, prohibir o regular

En Europa conviven varios modelos

– Legalista. Holanda, Alemania, Dinamarca. En Holanda la prostitución está regulada como un trabajo desde el año 2000. La ley obliga a los propietarios de los burdeles a pagar impuestos y la Seguridad Social de las prostitutas. Éstas, que deben tener una licencia municipal, tienen derecho a Seguridad Social y a cobrar el paro. La misma situación que en Alemania. En Dinamarca, las prostitutas pagan impuestos pero no tienen paro ni Seguridad Social.

– Nuevo abolicionismo. Suecia, Noruega, Islandia. Suecia fue pionero, en 1999, en aprobar una ley contra la compra de servicios sexuales. Esta normativa prohíbe pagar por el sexo y penaliza al cliente con multas de prisión y económicas. Es un modelo actualmente en expansión.

Alegalidad. España, Italia. La prostitución es legal en España –sí está penado el proxenetismo–, donde dos de cada diez hombres admiten que han pagado los servicios de una prostituta (estudio de la Universidad de Comillas para el Ministerio de Sanidad). Sin embargo, algunas ordenanzas municipales la prohíben y multan tanto a los clientes como a las mujeres. Una situación similar a la de Italia, donde en los últimos años han proliferado las situaciones que penalizan tanto la compra de sexo como la venta.

Prohibicionista. En Hungría la prostitución es ilegal. Se penaliza, sobre todo a la meretriz que ejerza en “zonas protegidas”. Ellas se enfrentan a multas o incluso a cárcel, al cliente solo se sanciona si “acepta” los servicios de una menor. [2]

 

Las olas y el viento. Feministas del mundo
Las olas y el viento. Feministas del mundo

 

* La entrevistada prefirió preservar su identidad.
[1] Esta feminista fue precursora también del movimiento de la “Maternidad feliz” hoy materializado en una instancia de atención sanitaria conocida con el nombre de “Planning familial” en toda Francia, que milita por la educación a la sexualidad, a la contracepción y al aborto, contra toda forma de violencia y discriminación. La integran voluntarios, asalariados y adherentes.

[2] https://elpais.com/internacional/2016/04/07/actualidad/1460050306_463588.html

Nota de Archivo El País Internacional, María Sahuquillo, Madrid

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