Carina Rago, del programa estatal “Las víctimas contra las violencias”, va a los motivos de fondo de la violencia de género. Hombres, poder y victimización.
El programa “Las víctimas contra las violencias” del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación logró algo inédito en la Argentina: que el Estado brinde asistencia en persona y acompañamiento a las víctimas de diferentes tipos de violencia. En la segunda parte de este reportaje (ver la primera parte) Carina Rago, psicóloga y una de las coordinadoras del área de víctimas de violencia sexual, conversó a fondo con Los Despertadores para comprender los motivos sociales y psicólogicos detrás de la violencia de género.
“¿Qué pasa cuando una mujer está exigiendo un lugar de igualdad y equidad? Ahí empiezan estas situaciones de violencia. A veces no llegan a los golpes pero está naturalizada. De hecho, desde los medios, en las publicidades, se sigue naturalizando a la mujer asociada a la limpieza y las que tienen que ver con cuestiones de fuerza están representadas por hombres”, observó Rago.
Según su opinión, “los medios siguen convocando este lugar de sometimiento cuando neutralizan o ponen a la mujer víctima en un lugar de no poder. `Pobrecita, cómo va a seguir su vida después de haber sido violada, etc. Así se neutraliza la pasividad de las mujeres desde el periodismo y que la mujer sostenga este lugar”.
“El hombre empieza a creer que está perdiendo poder. pero no es así: se le está pidiendo un lugar de igualdad”, continuó la coordinadora de “Las víctimas contra las violencias”. Y siguió: “No es que hoy hay más violencia hacia las mujeres que antes, sino que ahora los casos son más visibles porque las mujeres se están atreviendo a denunciarlos. Porque antes lo que sucedía dentro de la familia quedaba como un secreto familiar”. Pero eso ya cambió.
Rago va más allá en análisis: “Hay un sistema patriarcal milenario que sigue vigente en el que las mujeres y los niños quedan en un lugar de desfazaje de poder inferior a un otro que suele ser el hombre. En esa desigualdad se determinan los roles y sigue instalado el ‘deber ser’ de la mujer hacia el hombre. La mujer queda neutralizada al sometimiento hacia el hombre”.
A su vez, la piscológa recordó que “las mujeres hemos logrado muchas cosas. Hemos accedido al voto no hace mucho tiempo. A pesar de que la mujer trabaja a la par del hombre sigue cumpliendo algunos roles con el lugar del ser mujer, como la maternidad, el cuidado de los hijos, el orden y la limpieza del hogar. Al mismo tiempo, muchos hombre creen que lo laboral, lo político -ámbitos de poder, tienen que estar reservado para ellos“.
Ver la primera parte de la nota: Brigada a domicilio contra la violencia de género.
Fuente: Programa «Las víctimas contra las Violencias»
Por: Cindy Monzón