
No hay nuevas masculinidades si no hay educación sexual

Enrique Stola, médico psiquiatra y experto en el abordaje psicosocial de problemáticas vinculadas al maltrato y abuso desde una perspectiva feminista y de derechos humanos, abordó la importancia de trabajar sobre las nuevas masculinidades y afirmó que “no hay posibilidades de nuevas masculinidades si no hay educación sexual que atraviese todas las materias, todas las prácticas”
“Cuando hablamos de nuevas masculinidades queremos visibilizar la existencia de masculinidades alternativas a la hegemónica, a la preponderante, a la comúnmente conocida o relacionada con el modo de ser varón, entendiendo que hay una masculinidad arraigada en nuestra cultura, nuestra sociedad patriarcal, que es ese tipo de masculinidad que trata de asegurarse esa dominación sobre el género femenino y por sobre las demás identidades”, explicó el especialista en una charla que mantuvo en la columna de ESI de Analía Morra (Modo Glitter).
En esa línea, señaló que “para asegurarse ese poder, ejerce ese tipo de control y represión sobre los otros géneros” y consideró “sumamente importante” tener en cuenta esto para “trabajarlo en las aulas”.
“Queremos que la Educación Sexual Integral rompa las paredes de las aulas y les llegue a toda la sociedad, sobre todo a las ciudadanas y a los ciudadanos que no tuvieron ESI en su educación formal. Hablar de nuevas masculinidades o masculinidades alternativas supone proponerles a los varones una vida alejada de los mandatos machistas y generar un clima libre de violencias en sus relaciones y vínculos afectivos”.
AM: ¿Qué importancia crees que tiene o que debería tener dentro de la ESI el abordaje de las nuevas masculinidades?
ES: No hay posibilidades de nuevas masculinidades si no hay educación sexual. Y cuando hablo de educación sexual no me estoy refiriendo solo a niñas, niñes, niños pequeños, sino a una educación que atraviese todas las materias, todas las prácticas, hasta que la persona esté madura, hasta los 25-26 años. Entonces si pensamos que los sectores poderosos, como la iglesia o los sectores conservadores, se oponen a la educación sexual integral… Alguien educa. Y quien está educando a partir de los 8 o 9 años, además de los medios de comunicación con su lenguaje y posiciones sexistas, es la pornografía.
A los chicos y adolescentes los educa la pornografía porque tienen acceso. Educa al varón en una situación de dominio, que todo se tiene que hacer en función de su supuesto deseo y de una forma de desear, una forma de mirar a la mujer o mirar otros cuerpos y muestra a la mujer en una actitud siempre complaciente y subordinada. Estamos repitiendo los estereotipos sociales. Por lo tanto, no hay posibilidades de replanteo de masculinidades sin feminismo y no hay posibilidad de replanteo de masculinidad libre o no dominante sin educación sexual integral.
Tener privilegios es ejercer poder.
El especialista planteó que, cuando se aborda esta temática en la escuela, en muchas ocasiones los varones “se sienten incómodos o niegan los privilegios. Y tener privilegios es ejercer poder. Por ejemplo en el hogar. En una pareja heterosexual, el varón ejerce poder cuando la mujer es la responsable del funcionamiento del hogar. Cuando la mujer trabaja muchas más horas que el varón en tareas de cuidado y eso está demostrado científicamente, es decir, está demostrado en métodos estadísticos que son métodos científicos”.
De esta manera, continuó, “uno ejerce poder sacándole el tiempo a la otra persona y donde hay que hacer hincapié es en la carga mental que esto significa para las mujeres. Hay varones que se molestan cuando esto se hace evidente. No todos los varones van a cambiar, la educación sexual integral es una oportunidad de cambio para que cada varón sea más libre, porque al dejar de dominar se gana en libertad”.
Una política para los varones.
Stola advirtió sobre la flata de “una política diferente para los varones, porque en las sociedades patriarcales hay políticas para varones y es esa política que es explícita y otras veces no, está oculta”.
“Son los curriculum ocultos que hay escolares, universitarios. Son las trampas de la cultura que fortalecen la estereotipia de lo que debe ser un macho en la sociedad. Esas son políticas para varones”, agregó y remarcó que “son necesarias políticas anti patriarcales que visibilicen y rompan los mecanismos de dominación que a nivel macro y a nivel micro podemos ejercer”.
“Yo no tengo claro cómo debería ser una política para varones, pero lo que sí tengo claro es que las personas que pueden impulsar una política para varones son las mujeres, desde el Ministerio de la Mujer, de Géneros y Diversidad, ya que son las personas que socialmente se tiende a subordinar las que están en mejores condiciones de ver cuál es el comportamiento de todos nosotros y de visibilizarlo”.
Transcripción: Alejandra Funes
Mariano Cupayolo -
Excelente columna y entrevista a Enrique.
A falta de ESI a los varones nos educa la pornografía.
A falta de ESI ganan terreno los abusos, silencios y complicidades de los sectores conservadores, machistas y patriarcales.
A falta de ESI emerge por todos los poros la discriminación y violencias hacia niñeces trans.
A falta de ESI se continúa replicando los modelos binarios hegemónicos.
A falta de ESI la Masculinidad hegemónica se hace presente e imapacta en los vínculos escolares.
A falta de ESI una Argentina atrasada, anacrónica y que no garantiza los derechos en las INFANCIAS.