El bullying, primer causa de suicidio adolescente según la OMS
El acoso escolar afecta gravemente a niños y jóvenes alrededor del mundo. Según la OMS constituye la primer causa de suicidio adolescente por lo que la prevención o detección resultan factores clave.
- Graves consecuencias del bulliyng en la escuela.
- Si no es tratado puede derivar incluso en un atentado contra la vida de quien lo padece.
- En Jujuy se detectó el caso de un niño que terminó hospitalizado a causa de un ataque de otros alumnos. En 2017 se había dado a conocer otro hecho similar aunque igual de grave.
El término ‘bullying‘ fue desarrollado en la década de 1970 para hacer referencia a una forma de maltrato, normalmente intencionado, que se da en el marco de la escuela entre un estudiante (o un grupo de estudiantes) hacia otro alumno que es considerado el blanco habitual de los ataques.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), el bullying constituye la primera causa de suicidio adolescente; por eso, son cada vez más las acciones globales que se intentan llevar a cabo para combatirlo.
Según datos globales de Unicef, la mitad de los adolescentes del mundo sufre violencia en las escuelas. Alrededor de 150 millones de estudiantes de entre 13 y 15 años han confesado sufrir de violencia entre compañeros en la escuela y en sus inmediaciones.
En el ámbito escolar el hostigamiento toma diferentes formas: físico, verbal o social. El más fácil de detectar es generalmente el maltrato físico, porque es claramente observable. El verbal y el social se dan de manera más solapada, lo cual dificulta su detección.
A veces el maltrato se da por la discriminación hacia alguna característica personal o familiar, ya sea religión, orientación sexual, nacionalidad, etnia o condición económica.
En diálogo con Canal 2, Gabriela Muñoz, presidente de la Fundación «Luz de Vida» resumió que:
“Si hay alguien que expresa violencia es porque ha sufrido violencia”.
El bullying generalmente es ejercido por un niño que ha también ha sido hostigado por un miembro cercano. Sin embargo, especialistas señalan que es vital que la escuela también se aboque a ese niño y mostrarle que el también es una victima.
Gabriela Mures, del Equipo Bullying Cero en Argentina, explicó en una nota con Infobae que, «Un chico que es, de alguna manera, el agresor, que ve que puede actuar con cierta impunidad, lo hace en la escuela o en la casa, y el día de mañana (lo hará) en otros ámbitos».
«Hay que evitar el ascenso de esas conductas que no son tratadas bien en la escuela, no son tan visibles. Por otro lado, eligen siempre jugar con el poder, ya que nadie se quiere juntar con la víctima. Su imagen fortalece la conducta violenta», concluyó.